Hoy escribimos en “Compositores Ilustres” sobre Francisco Guerrero, uno de los músicos más importantes de la escuela española renacentista (léase “Compositores Ilustres VI: El Renacimiento”) junto con Cristóbal de Morales y Tomás Luis de Victoria.
Nació en Sevilla en el año 1528. Sus primeras nociones musicales vendrían de manos de su propio hermano Pedro al ingresar en el coro de la catedral de Sevilla, y años más tarde del ya nombrado Cristóbal de Morales. Sus progresos y virtudes debieron despuntar temprano pues con sólo diecisiete años llegó a ser maestro de capilla de la catedral de Jaén primero y de Sevilla después. Como la gran parte de los compositores de renombre de su misma época, Guerrero entraría dentro de la órbita de la nobleza, como fue el caso del emperador Maximiliano II quien contrató sus servicios durante unos años.
En 1581 Guerrero viajó a Italia en donde se enriqueció de la cultura musical que por aquel entonces bullía en Roma. Poco después visitaría Tierra Santa pero en su viaje de regreso, unos piratas le tomarían preso al comprobar seguramente su procedencia de clase alta. Los piratas pidieron un alto rescate económico por su vida, precio que tuvo que desembolsar su familia.
Catedral de Sevilla en la que Guerrero desarrolló su carrera. |
De regreso a su Sevilla natal, Guerrero volvería a dirigir el coro de la catedral lo cual le proporcionó un salario oportuno para saldar sus deudas. En el año 1599 fallecía contagiado de peste, una enfermedad que diezmaría considerablemente la ciudad hispalense durante el siglo siguiente, al igual que otras ciudades europeas.
Francisco Guerrero compuso tanto obras de carácter religioso como profano. Compuso 18 misas y más de 150 piezas que incluyen motetes, salmos, himnos, magníficats, villancicos, entre otros. Además, compuso abundante obra instrumental, hecho atípico para la época y distintivo con respecto a otros músicos. Su obra llegó a ser muy popular pues continuó interpretándose varias décadas después de su muerte influyendo en compositores posteriores, especialmente en América donde su música era interpretada en las primeras catedrales levantadas del Nuevo Mundo.
Guerrero alcanzó un reconocido prestigio durante su vida, siendo comparado con otros grandes autores como Orlando di Lasso o Cristóbal de Morales.
Guerrero es por excelencia uno de los compositores más interpretados por Gaudia Música, de hecho en el disco "Sacra et profana" en el que colaboramos con dos obras, una de ellas es del propio Guerrero. Si pincháis AQUÍ podéis oírla. En este mismo disco también hay otras obras de Guerrero interpretadas por los diferentes coros que participan en el disco. Os recomendamos que oigáis todas las piezas porque son una preciosidad, lo podéis hacer pinchando AQUÍ.
Si queréis leer más sobre Francisco Guerrero en este mismo blog publicamos hace unos meses una divertida entrada llamada "Francisco Guerrero vs. J. S. Mastropiero".
Esperemos que os haya gustado esta nueva entrada de "Compositores ilustres". En menos de un mes publicaremos la biografía de un magnífico compositor, Tomás Luis de Victoria. Con él cerraremos un capitulo importante de la historia de la música, como es el Renacimiento, y nos adentraremos en otro periodo no menos importante, el barroco.
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